MÁS ALLÁ DEL MAR II
Un nuevo amanecer, un nuevo día.
La
misma oscuridad,
El mismo rugido del mar, del viento.
La luna, pequeñita, oculta por las
nubes,
De una noche de invierno.
Todo igual…
Nada distinto, aquella noche, cuando quise saber que
existía
Más allá, del punto, donde el mar y el cielo se perdían.
Más allá del horizonte…
Más allá del mar… más allá del
cielo…
Donde creía, que el amor existía,
Donde creía, que había un mundo de
ensueños.
¡Pobre de mí! Siempre soñando; ¡Pobre
ilusa!
Que
siempre busco, todo lo que sueño.
Lo que siempre, es imposible; lo
que siempre espero,
Lo que siempre, en mi imaginación creo.
Siempre voy en pos de algo bueno,
Siempre busco dar y encontrar, lo
que quiero.
Siempre escribo, lo que nadie
escribe,
Siempre sueño, lo que nadie sueña,
Siempre me pierdo, en
pensamientos que nadie piensa…
Porque me pierdo en mis silencios…
Porque viajo por un mundo, imaginario
De hadas, gnomos, duendecillos, que
cantan a la vida
¡Al amor, a la fe, a la alegría!
Porque escriben con estrellas y en
las nubes, viajan…
Más allá del mar, más allá del
tiempo.
Otra vez, en este amanecer, quiero viajar a
ese punto
Donde el mar y el cielo se encuentran...
Y saber que existe, más allá del
mar…
Del horizonte… más allá…
Más allá... del tiempo...
Eva
Sábado
14 de mayo de 2016
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