EL OLVIDO II
Poco a poco tu figura se diluye
Como la niebla de la montaña
nuestra.
Poco a poco, te pierdes entre las
nubes
Al alejarte por el camino
Estrecho y pedregoso del olvido.
Poco a poco tus huellas se han
borrado
En
la niebla, las piedras, la oscuridad y el frío.
¿Yo? Solo miro a lo lejos el camino…
Hasta que tú figura se confunde
Con un árbol milenario, que al mover sus ramas…
Se asemejan a tus brazos, al decir
adiós, al despedirte
Sin mirar atrás, sin detenerte,
Por el miedo que te da… de
devolverte.
¿Yo? solo dejo que te vayas.
Es tu hora de partir…
Nada en la vida se pide, se impone
o se suplica.
Nada es, para siempre, nada dura.
Menos, cuando se miente,
Cuando todo es una fantasía,
Un sueño, inventado o soñado.
Puede ser también, una amarga
pesadilla.
De una noche cálida de verano,
O de una noche fría de invierno,
como ahora,
O de una noche suave, de otoño o
primavera.
El olvido es así...
Se olvida lo grande, lo pequeño,
Lo importante, o lo que no lo es.
Lo bueno, lo malo, lo feo o lo
bello,
Lo que nos hizo reír o suspirar.
Lo que nos hizo llorar y sonreír.
El olvido es así.
Eva
Miércoles 25 de
enero de 2017
Derechos de Autor Reservado de R. de C.
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