¡Cómo me gusta, que quieras seguir
soñando!
Querido amigo, sueña… nadie te ha
olvidado.
¡La soledad, la melancolía, el
olvido, la angustia!
No son tus compañeras…
¿Tú? No las conoces...
¿Entonces? ¡No sabes! Que… van regalando.
Tus recuerdos…me los has contado… y
son bellos...
¿Tu amor? Es grande y perdura.
¿Entonces?
¿Qué esperas? ¿A quién buscas?
Por quién has preguntado?
Sueña… mi querido amigo.
Cierra los ojos y el parque, ya no
estará vacío.
El banco tendrá el perfume de tu
sueño.
El ruiseñor cantara de nuevo
Y la brisa, el rocío y la llovizna
De un amanecer de primavera,
Volverán al parque abandonado.
Puede, que el camino desolado,
Por el que un día dijiste adiós y
un hasta nunca,
Vuelva a llenarse, de: siempre vivas
y margaritas
Tan blancas y rosaditas
Que podrás tenerlas entre tus
manos.
La melodía de la fuente… se escuchará de
nuevo
Y dirá: te quiero, te amo… no te he olvido…
Siempre he estado aquí… siempre…
en silencio…
Pero a tu lado.
¿Entonces?
No habrá tristezas, ni silencios…
Ya nada estará oscuro ni apagado.
Si tú quieres: ¡todo será luz,
alegría, todo será bello!
Pero para ello, cerraras tus ojos
Y escucharas mi voz. Decir: te amo.
Pero no olvides…
Que será un sueño… solo un sueño.
Tus noches serán cortitas, nada de
eternas,
Tus días serán iguales:
Alegres, llenos de suspiros… y
sonrisas.
Escribirás, muchos te quiero…
Y no pensaras ya más, que son un
sueño.
Solo un sueño… que se ha
inventado.
Eva
Domingo 8 de abril
de 2018
Derechos de
Autor Reservados por la R. de C.
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