El segundo
de la saga del amor
AMOR
Amo, el
silencio de los
muertos,
Amo, el
sonido dulce de
la brisa,
Amo, la
soledad de la
penumbra,
Amo, la
calidez de una
sonrisa.
Amo, el
sueño de los
niños,
Amo, la
inocencia del anciano,
Amo, la
intrepidez del jovencito
Y la
locura innata, del
payaso.
Amo, el
mar con su
rugido,
Amo, la
selva virgen del
olvido,
Amo, la
soledad del infinito
Y el
misterio profundo, del
arcano
¡Amo… El Amor!…
Amo, los sueños y
la fantasía,
Amo, la
razón de la
locura
Y la
insensatez, de la
cordura.
Amo, la
soledad y la
ternura,
Del cariño
sincero y silencioso,
Amo, el
recuerdo de tus
besos
Y el
calor asombroso de
tus brazos.
Amo, la soledad…
La que
dejaste…
Amo, la
tristeza al decir
adiós… Al olvidarte….
Amo, el
dolor de sufrir… Sin
sufrir nada…
Porque dejaste
de existir… En ese instante.
Eva
Medellín Siglo
XX
Jueves 12 de febrero de 2015
Derechos
de Autor Reservados
Tú amas amiga mía
ResponderEliminara toda la existencia y a la nada.
Por ello amas tanto a la poesía,
por ello sueñas con alcanzar la utopía.
Por eso amiga mía sigue amando,
tanto a la oscuridad de la noche,
como a la luz de un claro día.
Ama, ama amiga mía que amando
Se alcanzan los sueños cada día.
Muy, muy bonita. Rodri